Versículos de la Biblia sobre 'Espíritu'
- Si el Espíritu nos da vida, andemos guiados por el Espíritu.
- Lo que nace del cuerpo es cuerpo; lo que nace del Espíritu es espíritu.
- El Espíritu mismo asegura a nuestro espíritu que somos hijos de Dios.
- Dios es espíritu y quienes lo adoran deben hacerlo en espíritu y en verdad.
- Ahora bien, el Señor es el Espíritu, y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad.
- Ahora bien, Dios nos ha revelado esto por medio de su Espíritu, pues el Espíritu lo examina todo, hasta las profundidades de Dios.
- Que la gracia del Señor Jesucristo sea con su espíritu.
- Los que viven conforme a la carne fijan la mente en los deseos de la carne; en cambio, los que viven conforme al Espíritu fijan la mente en los deseos del Espíritu.
- El que siembra para agradar a su carne, de esa misma carne cosechará destrucción; el que siembra para agradar al Espíritu, del Espíritu cosechará vida eterna.
- Y ustedes no recibieron un espíritu que de nuevo los esclavice al miedo, sino el Espíritu que los adopta como hijos y les permite clamar: «¡Abba! ¡Padre!».
- Así que les digo: vivan por el Espíritu y no sigan los deseos de la carne.
- Esfuércense por mantener la unidad del Espíritu mediante el vínculo de la paz.
- Dichosos los pobres en espíritu,
porque el reino de los cielos les pertenece. - Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios son hijos de Dios.
- Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio
y renueva un espíritu firme dentro de mí. - Todos fuimos bautizados por un solo Espíritu para constituir un solo cuerpo —ya seamos judíos o no, esclavos o libres—, y a todos se nos dio a beber de un mismo Espíritu.
- Porque esta desea lo que es contrario al Espíritu y a su vez el Espíritu desea lo que es contrario a ella. Los dos se oponen entre sí, de modo que ustedes no pueden hacer lo que quieren.
- El altivo será humillado,
pero el de espíritu humilde será enaltecido. - Yo mismo no lo conocía, pero el que me envió a bautizar con agua me dijo: “Aquel sobre quien veas que el Espíritu desciende y permanece es el que bautiza con el Espíritu Santo”.
- En efecto, ¿quién conoce los pensamientos del ser humano sino su propio espíritu que está en él? Así mismo, nadie conoce los pensamientos de Dios sino el Espíritu de Dios.
- Tomen el casco de la salvación y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios.
- Así mismo, en nuestra debilidad el Espíritu acude a ayudarnos. No sabemos qué pedir, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos que no pueden expresarse con palabras.
- ¿No saben que ustedes son templo de Dios y que el Espíritu de Dios habita en ustedes?
- En esto pueden discernir quién tiene el Espíritu de Dios: todo el que confiese que Jesucristo ha venido en cuerpo humano es de Dios; todo espíritu que no confiesa a Jesús no es de Dios, sino del anticristo. Ustedes han oído que este viene y, efectivamente, ya está en el mundo.
- Nunca dejen de ser diligentes; antes bien, sirvan al Señor con el fervor que da el Espíritu.
- La lengua que brinda alivio es árbol de vida;
la lengua perversa deprime el espíritu. - Pues Dios no nos ha dado un espíritu de timidez, sino de poder, de amor y de dominio propio.
- Y Dios, que examina los corazones, sabe cuál es la intención del Espíritu, porque el Espíritu intercede por los creyentes conforme a la voluntad de Dios.
- La mente gobernada por la carne es muerte, mientras que la mente que proviene del Espíritu es vida y paz.
- Jesús, lleno del Espíritu Santo, volvió del Jordán y fue llevado por el Espíritu al desierto. Allí estuvo cuarenta días y fue tentado por el diablo. No comió nada durante esos días, pasados los cuales tuvo hambre.
- Que la gracia del Señor Jesucristo sea con su espíritu. Amén.
- Al probar Jesús el vinagre, dijo: —Todo se ha cumplido. Luego inclinó la cabeza y entregó el espíritu.
- No agravien al Espíritu Santo de Dios con el que fueron sellados para el día de la redención.
- Hay un solo cuerpo y un solo Espíritu, así como también fueron llamados a una sola esperanza.
- Enséñame a hacer tu voluntad,
porque tú eres mi Dios.
Que tu buen Espíritu me guíe
por un terreno firme. - De esta forma sabemos que permanecemos en él y que él permanece en nosotros: porque nos ha dado de su Espíritu.
- Entonces Jesús exclamó con fuerza: —¡Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu! Y al decir esto, expiró.
- Infundiré mi Espíritu en ustedes y haré que sigan mis estatutos y obedezcan mis leyes.
- Y si el Espíritu de aquel que levantó a Jesús de entre los muertos vive en ustedes, el mismo que levantó a Cristo de entre los muertos también dará vida a sus cuerpos mortales por medio de su Espíritu, que vive en ustedes.
- Aparecieron entonces unas lenguas como de fuego que se repartieron y se posaron sobre cada uno de ellos. Todos fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en diferentes lenguas, según el Espíritu les concedía expresarse.
- Permanezcan despiertos y oren para que no caigan en tentación. El espíritu está dispuesto, pero el cuerpo es débil.
- Cuando comencé a hablarles, el Espíritu Santo descendió sobre ellos tal como al principio descendió sobre nosotros.
- Te aseguro que quien no nazca de agua y del Espíritu no puede entrar en el reino de Dios —respondió Jesús—.
- El sacrificio que te agrada
es un espíritu quebrantado;
tú, oh Dios, no desprecias
al corazón quebrantado y arrepentido. - Que la gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios y la comunión del Espíritu Santo sean con todos ustedes.
- Nosotros somos testigos de estos acontecimientos, y también lo es el Espíritu Santo que Dios ha dado a quienes le obedecen.
- Porque lo dice el Alto y Excelso,
el que vive para siempre, cuyo nombre es Santo:
«Yo habito en un lugar santo y sublime,
pero también con el contrito y humilde de espíritu,
para reanimar el espíritu de los humildes
y alentar el corazón de los quebrantados.» - Y esta esperanza no nos defrauda, porque Dios ha derramado su amor en nuestro corazón por el Espíritu Santo que nos ha dado.
- Porque sé que, gracias a las oraciones de ustedes y a la ayuda que me da el Espíritu de Jesucristo, todo esto resultará en mi liberación.
- Oren en el Espíritu en todo momento, con peticiones y ruegos. Manténganse alertas y perseveren en oración por todos los creyentes.
Versículo de la Biblia del día
Y así como reinó el pecado en la muerte, reine también la gracia que nos trae justificación y vida eterna por medio de Jesucristo nuestro Señor.Versículo de la Biblia al Azar
Confía en el Señor de todo corazóny no te apoyes en tu propia inteligencia.
Reconócelo en todos tus caminos
y él enderezará tus sendas.Siguiente versículo!Con imagen






