Versículos de la Biblia sobre 'Verdad'
- El fruto de la luz consiste en toda bondad, justicia y verdad.
- Nada me produce más alegría que oír que mis hijos viven en la verdad.
- Dios es espíritu y quienes lo adoran deben hacerlo en espíritu y en verdad.
- La suma de tus palabras es la verdad;
tus justas leyes permanecen para siempre. - Pues tu gran amor se eleva hasta los cielos
y tu verdad llega hasta las nubes. - Queridos hijos, no amemos de palabra ni de labios para afuera, sino con hechos y de verdad.
- Yo soy el camino, la verdad y la vida —contestó Jesús—. Nadie llega al Padre sino por mí.
- Jesús se dirigió entonces a los judíos que habían creído en él, y les dijo: —Si se mantienen fieles a mis palabras, serán realmente mis discípulos; y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres.
- No me niegues, Señor, tu misericordia;
que siempre me protejan tu amor y tu verdad. - Encamíname en tu verdad.
Y enséñame,
porque tú eres mi Dios y mi salvación.
¡En ti pongo mi esperanza todo el día! - Más bien, al vivir la verdad con amor, creceremos hasta ser en todo como aquel que es la cabeza, es decir, Cristo.
- Si afirmamos que tenemos comunión con él, pero vivimos en la oscuridad, mentimos y no ponemos en práctica la verdad.
- Pues te cubrirá con sus plumas
y bajo sus alas hallarás refugio.
Su verdad será tu escudo y tu baluarte. - Reconoce debidamente a las viudas que de veras están desamparadas.
- En cambio, el que practica la verdad se acerca a la luz, para que se vea claramente que ha hecho sus obras en obediencia a Dios.
- Por su propia voluntad nos hizo nacer mediante la palabra de verdad, para que fuéramos como los primeros frutos de su creación.
- Ustedes son de su padre, el diablo, cuyos deseos quieren cumplir. Desde el principio este ha sido un asesino, y no se mantiene en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando miente, expresa su propia naturaleza, porque es un mentiroso. ¡Es el padre de la mentira!
- El Señor está cerca de quienes lo invocan,
de quienes lo invocan en verdad. - El amor no se deleita en la maldad, sino que se regocija con la verdad. Todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.
- Pero digo la verdad: les conviene que me vaya porque, si no lo hago, el Consolador no vendrá a ustedes; en cambio, si me voy, se lo enviaré.
- Esfuérzate por presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse y que interpreta rectamente la palabra de verdad.
- Cuando venga el Consolador que yo les enviaré de parte del Padre, el Espíritu de verdad que procede del Padre, él testificará acerca de mí.
- En verdad, quien me encuentra halla la vida
y recibe el favor del Señor. - Y el Verbo se hizo hombre y habitó entre nosotros. Y contemplamos su gloria, la gloria que corresponde al Hijo único del Padre, lleno de gracia y de verdad.
- En verdad, nada hace el Señor y Dios
sin antes revelar sus planes
a sus siervos los profetas. - He escogido el camino de la fidelidad;
he preferido tus leyes. - A la verdad, como éramos incapaces de salvarnos, en el tiempo señalado Cristo murió por los impíos.
- Solo el de conducta intachable,
que practica la justicia
y de corazón dice la verdad;
que no calumnia con la lengua,
que no le hace mal a su prójimo
ni le acarrea desgracias a su vecino. - Que nunca te abandonen el amor y la verdad:
llévalos siempre alrededor de tu cuello
y escríbelos en la tabla de tu corazón.
Contarás con el favor de Dios
y tendrás buen nombre entre la gente. - Hemos llegado a tener parte con Cristo, si en verdad mantenemos firme hasta el fin la confianza que tuvimos al principio.
- Instrúyeme, Señor, en tu camino
para conducirme con fidelidad.
Dame integridad de corazón
para temer tu nombre. - Escucha, Señor, mi oración;
atiende a mi súplica.
Por tu fidelidad y tu justicia,
respóndeme. - Confía en el Señor y haz el bien;
establécete en la tierra y mantente fiel. - Manténganse firmes, ceñidos con el cinturón de la verdad, protegidos por la coraza de justicia y calzados con la disposición de proclamar el evangelio de la paz. Además de todo esto, tomen el escudo de la fe, con el cual pueden apagar todas las flechas encendidas del maligno.
- Es verdad que ustedes pensaron hacerme mal, pero Dios transformó ese mal en bien para lograr lo que hoy estamos viendo: salvar la vida de mucha gente.
- La gloria, Señor, no es para nosotros;
no es para nosotros, sino para tu nombre,
por causa de tu gran amor y tu fidelidad. - A la verdad, no me avergüenzo del evangelio, pues es poder de Dios para la salvación de todos los que creen: de los judíos primeramente, pero también de los que no son judíos.
- El Señor aborrece a los de labios mentirosos,
pero se complace en los que actúan con lealtad. - Pero ¿quién soy yo y quién es mi pueblo, para que podamos darte estas ofrendas voluntarias? En verdad, tú eres el dueño de todo y lo que te hemos dado, de ti lo hemos recibido.
- Pero los exhorto a temer al Señor y a servirle fielmente y de todo corazón, recordando los grandes beneficios que él ha hecho en favor de ustedes.
- Permanezcan despiertos y oren para que no caigan en tentación. El espíritu está dispuesto, pero el cuerpo es débil.
- Señor, tú eres mi Dios;
te exaltaré y alabaré tu nombre
porque has hecho maravillas.
Desde tiempos antiguos
tus planes son fieles y seguros. - En verdad, Dios ha manifestado a toda la humanidad su gracia, la cual trae salvación y nos enseña a rechazar la impiedad y las pasiones mundanas. Así podremos vivir en este mundo con dominio propio, justicia y devoción.
- Todos los deportistas se entrenan con mucha disciplina. Ellos lo hacen para obtener una corona que se echa a perder; nosotros, en cambio, por una que dura para siempre.
- Él es la Roca, sus obras son perfectas,
y todos sus caminos son justos.
Dios es fiel; no practica la injusticia.
Él es recto y justo. - Yo los bautizo a ustedes con agua como señal de su arrepentimiento. Pero el que viene después de mí es más poderoso que yo y ni siquiera merezco llevarle las sandalias. Él los bautizará con el Espíritu Santo y con fuego.
- Pedro tomó la palabra y dijo: —Ahora comprendo que en realidad para Dios no hay favoritismos, sino que en toda nación él ve con agrado a los que le temen y actúan con justicia.
- Ciertamente, ninguna disciplina, en el momento de recibirla, parece agradable, sino más bien dolorosa; sin embargo, después produce una cosecha de justicia y paz para quienes han sido entrenados por ella.
- Les aseguro que todo el que peca es esclavo del pecado —afirmó Jesús—.
- Les aseguro que ningún siervo es más que su amo y ningún mensajero es más que el que lo envió.
Versículo de la Biblia del día
¡Restáuranos, Señor Dios de los Ejércitos!Haz resplandecer tu rostro sobre nosotros,
y sálvanos.