Versículos de la Biblia sobre 'D��a'
- ¡Cuán dichoso es el hombre a quien Dios corrige!
No menosprecies la disciplina del Todopoderoso. - Mientras comían, Jesús tomó pan y lo bendijo. Luego lo partió y se lo dio a sus discípulos, diciéndoles: —Tomen y coman; esto es mi cuerpo.
- Dirigiéndose a todos, declaró: —Si alguien quiere ser mi discípulo, que se niegue a sí mismo, lleve su cruz cada día y me siga.
- Reconoce en tu corazón que, así como un padre disciplina a su hijo, también el Señor tu Dios te disciplina a ti.
- Dichosos ustedes cuando los odien,
cuando los discriminen, los insulten y los desprestigien
por causa del Hijo del hombre. - Al necio no le complace el discernimiento;
tan solo hace alarde de su propia opinión. - Dichosos los que lloran,
porque serán consolados. - El que adquiere cordura a sí mismo se ama,
y el que retiene el discernimiento prospera. - Entonces llamó a la multitud y a sus discípulos. —Si alguien quiere ser mi discípulo —les dijo—, que se niegue a sí mismo, lleve su cruz y me siga.
- Reciban al que es débil en la fe, pero no para entrar en discusiones.
- Les ruego, hermanos, que se cuiden de los que causan divisiones y dificultades, y van en contra de lo que a ustedes se les ha enseñado. Apártense de ellos.
- El comienzo de la sabiduría es el temor del Señor;
conocer al Santo es tener discernimiento. - El que es paciente muestra gran discernimiento;
el que es agresivo muestra mucha insensatez. - El odio es motivo de disensiones,
pero el amor cubre todas las faltas. - La sabiduría es lo primero. ¡Adquiere sabiduría!
Por sobre todas las cosas, adquiere discernimiento. - El de manos diligentes gobernará;
pero el perezoso será subyugado. - Dichosos los de corazón limpio,
porque ellos verán a Dios. - Hijo mío, no desprecies la disciplina del Señor,
ni te ofendas por sus reprensiones.
Porque el Señor disciplina a los que ama,
como corrige un padre a su hijo querido. - De este modo todos sabrán que son mis discípulos, si se aman los unos a los otros.
- Los que aman tu ley disfrutan de gran bienestar,
y nada los hace tropezar. - El que ama la disciplina ama el conocimiento,
pero el que la aborrece es un necio. - Dichosos todos los que temen al Señor,
los que van por sus caminos. - Dichosos los que guardan sus estatutos
y de todo corazón lo buscan. - El que practica el pecado es del diablo, porque el diablo ha estado pecando desde el principio. El Hijo de Dios fue enviado precisamente para destruir las obras del diablo.
- Dichosos los que tienen hambre y sed de justicia,
porque serán saciados.
