Versículos de la Biblia sobre 'Confianza'
- Cuando siento miedo, pongo en ti mi confianza.
- Esta es la confianza que tenemos al acercarnos a Dios: que, si pedimos cualquier cosa conforme a su voluntad, él nos oye.
- Bendito el hombre que confía en el Señor
y pone su confianza en él.
Será como un árbol plantado junto al agua
que extiende sus raíces hacia la corriente;
no teme que llegue el calor
y sus hojas están siempre verdes.
En época de sequía no se angustia
y nunca deja de dar fruto. - Por la mañana hazme saber de tu gran amor,
porque en ti he puesto mi confianza.
Señálame el camino que debo seguir,
porque a ti elevo mi alma. - Así que podemos decir con toda confianza:
«El Señor es quien me ayuda, no tengo miedo;
¿qué me puede hacer un simple mortal?». - Queridos hermanos, si el corazón no nos condena y tenemos confianza delante de Dios, recibimos todo lo que pedimos, porque obedecemos sus mandamientos y hacemos lo que le agrada.
- Hemos llegado a tener parte con Cristo, si en verdad mantenemos firme hasta el fin la confianza que tuvimos al principio.
- Confía en el Señor de todo corazón
y no te apoyes en tu propia inteligencia.
Reconócelo en todos tus caminos
y él enderezará tus sendas. - Aun cuando un ejército me asedie,
no temerá mi corazón;
aun cuando una guerra estalle contra mí,
yo mantendré la confianza. - Pon en manos del Señor todas tus obras
y tus proyectos se cumplirán. - Cuando cruces las aguas,
yo estaré contigo;
cuando cruces los ríos,
no te cubrirán sus aguas;
cuando camines por el fuego,
no te quemarás ni te abrasarán las llamas. - El que habita al abrigo del Altísimo
descansará a la sombra del Todopoderoso.
Yo digo al Señor: «Tú eres mi refugio,
mi fortaleza, el Dios en quien confío». - En efecto, vivimos por fe, no por vista.
- Dios es mi salvación y mi gloria;
es la roca que me fortalece;
mi refugio está en Dios. - No permitirá que tu pie resbale;
jamás duerme el que te cuida. - Ahora bien, la fe es tener confianza en lo que esperamos, es tener certeza de lo que no vemos.
- Pero que pida con fe, sin dudar, porque quien duda es como las olas del mar, agitadas y llevadas de un lado a otro por el viento.
- El Señor está cerca de quienes lo invocan,
de quienes lo invocan en verdad. - Fíjense en las aves del cielo: no siembran ni cosechan, ni almacenan en graneros; sin embargo, el Padre celestial las alimenta. ¿No valen ustedes mucho más que ellas?
- Temer a los hombres resulta una trampa,
pero el que confía en el Señor sale bien librado. - Encomienda al Señor tu camino;
confía en él y él actuará.
Hará que tu justicia resplandezca como el alba;
tu justa causa, como el sol de mediodía. - El que atiende a la palabra prospera.
¡Dichoso el que confía en el Señor! - Así que mi Dios les proveerá de todo lo que necesiten, conforme a las gloriosas riquezas que tiene en Cristo Jesús.
- ¿A quién tengo en el cielo sino a ti?
Si estoy contigo, ya nada quiero en la tierra. - Y ahora, queridos hijos, permanezcan en él para que, cuando se manifieste, podamos presentarnos ante él confiadamente, seguros de no ser avergonzados en su venida.
- La Ley del Señor es perfecta:
infunde nuevo aliento.
El mandato del Señor es digno de confianza:
da sabiduría al sencillo. - Manténganse libres del amor al dinero y conténtense con lo que tienen, porque Dios ha dicho: «Nunca los dejaré; jamás los abandonaré».
- En ti confían los que conocen tu nombre,
porque tú, Señor, jamás abandonas a los que te buscan. - Pon tu esperanza en el Señor;
cobra ánimo y ármate de valor,
¡pon tu esperanza en el Señor! - Bueno es el Señor;
es refugio en el día de la angustia
y conoce a los que en él confían. - Confía en el Señor y haz el bien;
establécete en la tierra y mantente fiel. - Y nosotros hemos llegado a saber y creer que Dios nos ama. Dios es amor. El que permanece en amor, en Dios permanece y Dios en él.
- ¡Cuán grande es tu bondad!
La reservas para los que te temen,
y a la vista de la gente la derramas
sobre los que en ti se refugian. - Confío en Dios y alabo su palabra;
confío en Dios y no siento miedo.
¿Qué puede hacerme un simple mortal? - Y si sabemos que Dios oye todas nuestras oraciones, podemos estar seguros de que ya tenemos lo que le hemos pedido.
- Queridos hermanos, no crean a cualquier espíritu, sino sométanlo a prueba para ver si es de Dios, porque han salido por el mundo muchos falsos profetas.
- Es mejor refugiarse en el Señor
que confiar en el hombre. - El Señor es mi fuerza y mi escudo;
mi corazón en él confía;
de él recibo ayuda.
Mi corazón salta de alegría,
y con cánticos le daré gracias. - No se angustien. Confíen en Dios y confíen también en mí.
- Al de carácter firme
lo guardarás en perfecta paz,
porque en ti confía. - Protégeme, oh Dios,
porque en ti busco refugio. - Pero si esperamos lo que todavía no vemos, en la espera mostramos nuestra constancia.
- Enseña a los esclavos a someterse en todo a sus amos, a procurar agradarles y a no ser respondones. No deben robarles, sino demostrar que son dignos de toda confianza, para que en todo hagan honor a la enseñanza de Dios nuestro Salvador.
- No digo esto porque esté necesitado, pues he aprendido a estar satisfecho en cualquier situación en que me encuentre.
- Pero yo confío en tu gran amor;
mi corazón se alegra en tu salvación.
Cantaré salmos al Señor,
porque ha sido bueno conmigo. - Por la poca fe que tienen —respondió—. Les aseguro que si tuvieran fe tan pequeña como una semilla de mostaza, podrían decirle a esta montaña: “Trasládate de aquí para allá” y se trasladaría. Para ustedes nada sería imposible.
- Que tu gran amor, Señor, nos acompañe,
tal como lo esperamos de ti. - El amor no se deleita en la maldad, sino que se regocija con la verdad. Todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.
- «Aunque cambien de lugar las montañas
y se tambaleen las colinas,
no cambiará mi fiel amor por ti
ni vacilará mi pacto de paz»,
dice el Señor, que de ti se compadece. - El Señor afirma los pasos del hombre
cuando le agrada su modo de vivir.
Versículo de la Biblia del día
No juzguen y no se les juzgará. No condenen y no se les condenará. Perdonen y se les perdonará.Versículo de la Biblia al Azar
El corazón alegre es un buen remedio,pero el ánimo decaído seca los huesos.Siguiente versículo!Con imagen