Versículos de la Biblia sobre 'Levanta'
- El Señor da vista a los ciegos,
el Señor levanta a los agobiados,
el Señor ama a los justos. - ¡Levántate, Señor!
¡Levanta, oh Dios, tu brazo!
¡No te olvides de los indefensos! - Si caen, el uno levanta al otro.
¡Ay del que cae
y no tiene quien lo levante! - ¡Levanta la voz y hazles justicia!
¡Defiende a los pobres y necesitados! - Pero tú, Señor, eres el escudo que me protege;
tú eres mi gloria;
tú mantienes en alto mi cabeza. - ¡Levanta la voz por los que no tienen voz!
¡Defiende los derechos de los desposeídos! - Yo sé que mi Redentor vive
y que al final se levantará sobre el polvo. - Por eso el Señor los espera, para tenerles piedad;
por eso se levanta para mostrarles compasión.
Porque el Señor es un Dios de justicia.
¡Dichosos todos los que en él esperan! - ¡Levántate y resplandece que tu luz ha llegado!
¡La gloria del Señor brilla sobre ti! - Y ahora, ¿qué esperas? Levántate, bautízate y lávate de tus pecados, invocando su nombre.
- No se dejen engañar de ninguna manera, porque primero tiene que llegar la rebelión contra Dios y manifestarse el hombre de maldad, el que está destinado a la destrucción. Este se opone y se levanta contra todo lo que lleva el nombre de dios o es objeto de adoración, hasta el punto de adueñarse del templo de Dios y pretender ser Dios.
- El perverso provoca contiendas
y el chismoso divide a los buenos amigos. - Pero los que confían en el Señor
renovarán sus fuerzas;
levantarán el vuelo como las águilas,
correrán y no se fatigarán,
caminarán y no se cansarán. - Señor, tú me examinas
y me conoces.
Sabes cuándo me siento y cuándo me levanto;
aun a la distancia me lees el pensamiento. - Pero para ustedes que temen mi nombre, se levantará el sol de justicia trayendo en sus rayos salud. Y ustedes saldrán saltando como becerros bien alimentados.
- ¿Está enfermo alguno de ustedes? Haga llamar a los líderes de la iglesia para que oren por él y lo unjan con aceite en el nombre del Señor. La oración de fe sanará al enfermo y el Señor lo levantará. Y si ha cometido pecados, sus pecados se le perdonarán.
- Cuando Dios resucitó a su siervo, lo envió primero a ustedes para darles la bendición de que cada uno se convierta de sus maldades.
- Torre fuerte es el nombre del Señor;
a ella corren los justos y se ponen a salvo. - Después de que Jesús nació en Belén de Judea en tiempos del rey Herodes, llegaron a Jerusalén unos sabios procedentes del Oriente. —¿Dónde está el que ha nacido rey de los judíos? —preguntaron—. Vimos levantarse su estrella y hemos venido a adorarlo.
- Entonces Jesús tomó los cinco panes y los dos pescados y, mirando al cielo, los bendijo. Luego los partió y se los dio a los discípulos para que se los repartieran a la gente. Todos comieron hasta quedar satisfechos y de los pedazos que sobraron se recogieron doce canastas.
- A las montañas levanto mis ojos;
¿de dónde ha de venir mi ayuda?
Mi ayuda proviene del Señor,
que hizo el cielo y la tierra. - El Señor mismo descenderá del cielo con voz de mando, con voz de arcángel y con trompeta de Dios, y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego los que estemos vivos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados junto con ellos en las nubes para encontrarnos con el Señor en el aire. Y así estaremos con el Señor para siempre.