- Vengan a mí todos ustedes que están cansados y agobiados, y yo les daré descanso.
- Jesús dijo: «Dejen que los niños vengan a mí, y no se lo impidan, porque el reino de los cielos es de quienes son como ellos».
- Porque, si perdonan a otros sus ofensas, también los perdonará a ustedes su Padre celestial.
- Porque donde dos o tres se reúnen en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.
- Más bien, busquen primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas.
- Fíjense en las aves del cielo: no siembran ni cosechan ni almacenan en graneros; sin embargo, el Padre celestial las alimenta. ¿No valen ustedes mucho más que ellas?
- Pero tú, cuando te pongas a orar, entra en tu cuarto, cierra la puerta y ora a tu Padre, que está en lo secreto. Así tu Padre, que ve lo que se hace en secreto, te recompensará.
- Por tanto, todo el que me oye estas palabras y las pone en práctica es como un hombre prudente que construyó su casa sobre la roca.
- Y al orar, no hablen solo por hablar como hacen los gentiles, porque ellos se imaginan que serán escuchados por sus muchas palabras.
- Pero vayan y aprendan qué significa esto: “Lo que pido de ustedes es misericordia y no sacrificios”. Porque no he venido a llamar a justos, sino a pecadores.
Versículo de la Biblia del día
¿Quién es este Rey de la gloria?Es el Señor Todopoderoso;
¡él es el Rey de la gloria! Selah