Versículos de la Biblia sobre el Redentor
- Jehová está en medio de ti;
¡él es poderoso y te salvará!
Se gozará por ti con alegría,
callará de amor,
se regocijará por ti con cánticos. - Te amo, Jehová, fortaleza mía.
Jehová, roca mía y castillo mío, mi libertador;
Dios mío, fortaleza mía, en él confiaré;
mi escudo y la fuerza de mi salvación, mi alto refugio. - Él se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda maldad y purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras.
- Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud.
- Claman los justos, y Jehová oye
y los libra de todas sus angustias.
Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón
y salva a los contritos de espíritu. - Yo deshice como a una nube tus rebeliones
y como a una niebla tus pecados;
vuélvete a mí, porque yo te redimí. - Así que, si el Hijo os liberta, seréis verdaderamente libres.
- Muchas son las aflicciones del justo,
pero de todas ellas lo librará Jehová. - Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu, porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte.
- En gran manera me gozaré en Jehová,
mi alma se alegrará en mi Dios,
porque me vistió con vestiduras de salvación,
me rodeó de manto de justicia,
como a novio me atavió
y como a novia adornada con sus joyas. - Mis labios se alegrarán
cuando cante para ti;
y mi alma, la cual redimiste. - «En tu mano están mis tiempos!»
Líbrame de manos de mis enemigos
y de mis perseguidores. - Dará a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados.
- El espíritu de Jehová, el Señor, está sobre mí,
porque me ha ungido Jehová.
Me ha enviado a predicar buenas noticias a los pobres,
a vendar a los quebrantados de corazón,
a publicar libertad a los cautivos
y a los prisioneros apertura de la cárcel. - En ti, Jehová, he confiado;
no sea yo confundido jamás.
¡Líbrame en tu justicia! - Pero ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por vuestro fruto la santificación y, como fin, la vida eterna.
- Los que amáis a Jehová, aborreced el mal;
él guarda las almas de sus santos;
de manos de los impíos los libra. - ¡Ayúdanos, Dios de nuestra salvación,
por la gloria de tu nombre!
¡Líbranos y perdona nuestros pecados
por amor de tu nombre! - ¡Libra mi alma, Jehová, del labio mentiroso
y de la lengua fraudulenta!
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