- El corazón del hombre traza su rumbo,
pero sus pasos los dirige el Señor. - El mundo se acaba con sus malos deseos, pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.
- Muchos serán purificados y perfeccionados, y quedarán limpios, pero los malvados seguirán en su maldad. Ninguno de ellos entenderá nada, pero los sabios lo entenderán todo.
- El Señor aborrece a los de labios mentirosos,
pero se complace en los que actúan con lealtad. - Gran remedio es el corazón alegre,
pero el ánimo decaído seca los huesos. - Pero, mientras mantenían a Pedro en la cárcel, la iglesia oraba constante y fervientemente a Dios por él.
- Pero el Señor le dijo a Samuel: —No te dejes impresionar por su apariencia ni por su estatura, pues yo lo he rechazado. La gente se fija en las apariencias, pero yo me fijo en el corazón.
- Estén alerta y oren para que no caigan en tentación. El espíritu está dispuesto, pero el cuerpo es débil.
- Los leoncillos se debilitan y tienen hambre,
pero a los que buscan al Señor nada les falta. - Porque con el corazón se cree para ser justificado, pero con la boca se confiesa para ser salvo.
- Cuídense de los falsos profetas. Vienen a ustedes disfrazados de ovejas, pero por dentro son lobos feroces.
- En el día de la ira de nada sirve ser rico,
pero la justicia libra de la muerte. - En los que fraguan el mal habita el engaño,
pero hay gozo para los que promueven la paz. - Los malvados piden prestado y no pagan,
pero los justos dan con generosidad. - El Señor tu Dios te bendecirá, como lo ha prometido, y tú podrás darles prestado a muchas naciones, pero no tendrás que pedir prestado de ninguna. Dominarás a muchas naciones, pero ninguna te dominará a ti.
- La respuesta amable calma el enojo,
pero la agresiva echa leña al fuego. - Ahora, pues, permanecen estas tres virtudes: la fe, la esperanza y el amor. Pero la más excelente de ellas es el amor.
- Honroso es al hombre evitar la contienda,
pero no hay necio que no inicie un pleito. - ¡Pero gracias a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo!
- El insolente no tiene el alma recta,
pero el justo vivirá por su fe. - El Señor da la riqueza y la pobreza;
humilla, pero también enaltece. - Pero, si no perdonan a otros sus ofensas, tampoco su Padre les perdonará a ustedes las suyas.
- Porque ustedes antes eran oscuridad, pero ahora son luz en el Señor. Vivan como hijos de luz.
- Pero ahora en Cristo Jesús, a ustedes que antes estaban lejos, Dios los ha acercado mediante la sangre de Cristo.
- Pero tú, oh Dios, estás sobre los cielos,
¡tu gloria cubre toda la tierra!
Versículo de la Biblia del día
Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio,y renueva la firmeza de mi espíritu.