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Versículos de la Biblia sobre 'Sin'

  • Como ciudad sin defensa y sin murallas
    es quien no sabe dominarse.
  • Todos los que han pecado sin conocer la Ley también perecerán sin la Ley; y todos los que han pecado conociendo la Ley por la Ley serán juzgados.
  • ¿Puede alguien caminar sobre las brasas
    sin quemarse los pies?
  • Busquen la paz con todos y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.
  • Por medio de él todas las cosas fueron creadas;
    sin él, nada de lo creado llegó a existir.
  • En verdad, nada hace el Señor y Dios
    sin antes revelar sus planes
    a sus siervos los profetas.
  • De hecho, la Ley exige que casi todo sea purificado con sangre, pues sin derramamiento de sangre no hay perdón.
  • La religión pura y sin mancha delante de Dios nuestro Padre es esta: atender a los huérfanos y a las viudas en sus aflicciones y conservarse limpio de la corrupción del mundo.
  • Como bien saben, ustedes fueron rescatados de la vida absurda que heredaron de sus antepasados. El precio de su rescate no se pagó con cosas perecederas, como el oro o la plata, sino con la preciosa sangre de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin defecto.
  • Háganlo todo sin quejas ni contiendas, para que sean intachables y puros, hijos de Dios sin culpa en medio de una generación torcida y depravada. En ella ustedes brillan como estrellas en el mundo, manteniendo en alto la palabra de vida.
  • Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, pídasela a Dios y él se la dará, pues Dios da a todos generosamente sin menospreciar a nadie.
  • ¿No se venden dos gorriones por una monedita? Sin embargo, ni uno de ellos caerá a tierra sin que lo permita el Padre. Él les tiene contados aun los cabellos de la cabeza. Así que no tengan miedo, ustedes valen más que muchos gorriones.
  • Sigan amándose unos a otros fraternalmente. No se olviden de practicar la hospitalidad, pues gracias a ella algunos, sin saberlo, hospedaron ángeles.
  • Estén siempre alegres, oren sin cesar, den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús.
  • Porque me has visto, has creído —le dijo Jesús—; dichosos los que no han visto y sin embargo creen.
  • En realidad, sin fe es imposible agradar a Dios, ya que cualquiera que se acerca a Dios tiene que creer que él existe y que recompensa a quienes lo buscan.
  • El amor debe ser sincero. Aborrezcan el mal; aférrense al bien.
  • Porque no tenemos un sumo sacerdote incapaz de compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que ha sido tentado en todo de la misma manera que nosotros, aunque sin pecado.
  • Trampa es consagrar algo sin pensarlo
    y más tarde reconsiderar lo prometido.
  • Sin embargo, en todo esto somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.
  • Ahora bien, no hace falta mediador si hay una sola parte y, sin embargo, Dios es uno solo.
  • Tal como salió del vientre de su madre,
    así se irá: desnudo como vino al mundo
    y sin llevarse el fruto de tanto trabajo.
  • Sin embargo, no se alegren de que puedan someter a los espíritus, sino alégrense de que sus nombres están escritos en el cielo.
  • Pero que pida con fe, sin dudar, porque quien duda es como las olas del mar, agitadas y llevadas de un lado a otro por el viento.
  • Fíjense en las aves del cielo: no siembran ni cosechan, ni almacenan en graneros; sin embargo, el Padre celestial las alimenta. ¿No valen ustedes mucho más que ellas?
  • Si esto es así, ¡cuánto más la sangre de Cristo, quien por medio del Espíritu eterno se ofreció sin mancha a Dios, purificará nuestra conciencia de las obras que conducen a la muerte, a fin de que sirvamos al Dios viviente!
  • Fíjense en los cuervos: no siembran ni cosechan, ni tienen almacén ni granero; sin embargo, Dios los alimenta. ¡Cuánto más valen ustedes que las aves!
  • Mantengamos firme la esperanza que profesamos, porque fiel es el que hizo la promesa.
  • Él, en cambio, conoce mis caminos;
    si me pusiera a prueba, saldría yo puro como el oro.
    En sus sendas he afirmado mis pies;
    he seguido su camino sin desviarme.
  • Sin embargo, es tal tu compasión que no los destruiste ni abandonaste, porque eres Dios misericordioso y compasivo.
  • Más vale tener poco con justicia
    que ganar mucho con injusticia.
  • Predica la palabra; persiste en hacerlo, sea o no sea oportuno; corrige, reprende y anima con mucha paciencia, sin dejar de enseñar.
  • Oh Dios, tú eres mi Dios;
    yo te busco intensamente.
    Mi alma tiene sed de ti;
    todo mi ser te anhela,
    cual tierra seca, sedienta y sin agua.
  • Manténganse libres del amor al dinero y conténtense con lo que tienen, porque Dios ha dicho: «Nunca los dejaré; jamás los abandonaré».
  • En cambio, la sabiduría que desciende del cielo es ante todo pura y además pacífica, respetuosa, dócil, llena de compasión y de buenos frutos, imparcial y sincera.
  • Tengan todos en alta estima el matrimonio y la fidelidad conyugal, porque Dios juzgará a los adúlteros y a todos los que cometen inmoralidades sexuales.
  • «Por lo tanto, adviérteles que así dice el Señor y Dios: “Mis palabras se cumplirán sin retraso: yo cumpliré con lo que digo”», afirma el Señor y Dios.
  • Ciertamente, ninguna disciplina, en el momento de recibirla, parece agradable, sino más bien dolorosa; sin embargo, después produce una cosecha de justicia y paz para quienes han sido entrenados por ella.
  • Después de haber orado, tembló el lugar en que estaban reunidos; todos fueron llenos del Espíritu Santo y proclamaban la palabra de Dios sin temor alguno.
  • Sin embargo, como está escrito:
    «Ningún ojo ha visto,
    ningún oído ha escuchado,
    ningún corazón ha concebido
    lo que Dios ha preparado para quienes lo aman».
  • ¿No se venden cinco gorriones por dos moneditas? Sin embargo, Dios no se olvida de ninguno de ellos. De hecho, él les tiene contados aun los cabellos de su cabeza. No tengan miedo, ustedes valen más que muchos gorriones.
  • El Señor es lento para la ira,
    pero grande en poder.
    El Señor no deja sin castigo al culpable.
    Camina en el huracán y en la tormenta;
    las nubes son el polvo de sus pies.
  • Les aseguro que si alguno dice a este monte: “Quítate de ahí y tírate al mar”, creyendo, sin abrigar la menor duda en el corazón de que lo que dice sucederá, lo obtendrá.
  • Pero mientras mantenían a Pedro en la cárcel, la iglesia oraba constante y fervientemente a Dios por él.
  • Y Moisés se quedó en el monte con el Señor cuarenta días y cuarenta noches, sin comer ni beber nada. Allí, en las tablas, escribió los términos del pacto, es decir, los diez mandamientos.
  • También Cristo fue ofrecido en sacrificio una sola vez para quitar los pecados de muchos. Aparecerá por segunda vez ya no para cargar con pecado alguno, sino para traer salvación a quienes lo esperan.
  • Dios hizo todo hermoso en su tiempo, luego puso en la mente humana la noción de eternidad, aun cuando el hombre no alcanza a comprender la obra que Dios realiza de principio a fin.
  • Ustedes lo aman a pesar de no haberlo visto; y aunque no lo ven ahora, creen en él y se alegran con un gozo indescriptible y glorioso, pues están obteniendo la meta de su fe, que es su salvación.
  • Sin embargo, considero que mi vida carece de valor para mí mismo, con tal de que termine mi carrera y lleve a cabo el servicio que me ha encomendado el Señor Jesús, que es el de dar testimonio del evangelio de la gracia de Dios.
  • Porque nada trajimos a este mundo y nada podemos llevarnos. Así que, si tenemos comida y ropa, contentémonos con eso.