DailyVerses.netTemasVersículo al AzarRegistrar

Versículos de la Biblia sobre 'Hablar con dios'

  • Después de hablar con ellos, el Señor Jesús fue llevado al cielo y se sentó a la derecha de Dios.
  • Que refrene su lengua de hablar el mal
    y sus labios de proferir engaños.
  • Mis queridos hermanos, tengan presente esto: Todos deben estar listos para escuchar, y ser lentos para hablar y para enojarse.
  • En el principio ya existía el Verbo,
    y el Verbo estaba con Dios,
    y el Verbo era Dios.
  • Cuando ustedes digan “sí”, que sea realmente sí; y, cuando digan “no”, que sea no. Cualquier cosa de más, proviene del maligno.
  • Se les aparecieron entonces unas lenguas como de fuego que se repartieron y se posaron sobre cada uno de ellos. Todos fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en diferentes lenguas, según el Espíritu les concedía expresarse.
  • Cuando comencé a hablarles, el Espíritu Santo descendió sobre ellos tal como al principio descendió sobre nosotros.
  • Y al orar, no hablen solo por hablar como hacen los gentiles, porque ellos se imaginan que serán escuchados por sus muchas palabras.
  • En consecuencia, ya que hemos sido justificados mediante la fe, tenemos paz con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo.
  • ¡Oh gente adúltera! ¿No saben que la amistad con el mundo es enemistad con Dios? Si alguien quiere ser amigo del mundo se vuelve enemigo de Dios.
  • Que nadie te menosprecie por ser joven. Al contrario, que los creyentes vean en ti un ejemplo a seguir en la manera de hablar, en la conducta, y en amor, fe y pureza.
  • No tengan nada que ver con las obras infructuosas de la oscuridad, sino más bien denúncienlas, porque da vergüenza aun mencionar lo que los desobedientes hacen en secreto.
  • Al oír esto, fueron bautizados en el nombre del Señor Jesús. Cuando Pablo les impuso las manos, el Espíritu Santo vino sobre ellos, y empezaron a hablar en lenguas y a profetizar.
  • Las costumbres de los pueblos
    no tienen valor alguno.
    Cortan un tronco en el bosque,
    y un artífice lo labra con un cincel.
    Lo adornan con oro y plata,
    y lo afirman con clavos y martillo
    para que no se tambalee.
    Sus ídolos no pueden hablar;
    ¡parecen espantapájaros
    en un campo sembrado de melones!
    Tienen que ser transportados,
    porque no pueden caminar.
    No les tengan miedo,
    que ningún mal pueden hacerles,
    pero tampoco ningún bien.
  • En efecto,
    «el que quiera amar la vida
    y gozar de días felices,
    que refrene su lengua de hablar el mal
    y sus labios de proferir engaños;
    que se aparte del mal y haga el bien;
    que busque la paz y la siga.»
  • Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas.
  • Todo esfuerzo tiene su recompensa,
    pero quedarse solo en palabras lleva a la pobreza.
  • “Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con todo tu ser y con toda tu mente” —le respondió Jesús—.
  • Los labios del justo destilan bondad;
    de la boca del malvado brota perversidad.
  • Como respuesta el hombre citó: —“Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con todo tu ser, con todas tus fuerzas y con toda tu mente”, y: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”.
  • Escucha, Israel: El Señor nuestro Dios es el único Señor. Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con todas tus fuerzas.
  • ¡Anda, come tu pan con alegría! ¡Bebe tu vino con buen ánimo, que Dios ya se ha agradado de tus obras!
  • Que el Señor nuestro Dios esté con nosotros, como estuvo con nuestros antepasados; que nunca nos deje ni nos abandone.
  • Clamé a él con mi boca;
    lo alabé con mi lengua.
  • Pero, si desde allí buscas al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma, lo encontrarás.
  • Tengo sed de Dios, del Dios de la vida.
    ¿Cuándo podré presentarme ante Dios?
  • El que no ama no conoce a Dios, porque Dios es amor.
  • Porque el Señor tu Dios está en medio de ti
    como guerrero victorioso.
    Se deleitará en ti con gozo,
    te renovará con su amor,
    se alegrará por ti con cantos.
  • Si alguien reconoce que Jesús es el Hijo de Dios, Dios permanece en él, y él en Dios.
  • ¿Acaso no creemos que Jesús murió y resucitó? Así también Dios resucitará con Jesús a los que han muerto en unión con él.
  • El Señor mismo descenderá del cielo con voz de mando, con voz de arcángel y con trompeta de Dios, y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego los que estemos vivos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados junto con ellos en las nubes para encontrarnos con el Señor en el aire. Y así estaremos con el Señor para siempre.
  • Alégrense con los que están alegres; lloren con los que lloran.
  • La creación aguarda con ansiedad la revelación de los hijos de Dios.
  • Y nosotros hemos llegado a saber y creer que Dios nos ama. Dios es amor. El que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él.
  • Fiel es Dios, quien los ha llamado a tener comunión con su Hijo Jesucristo, nuestro Señor.
  • De este modo, por la voluntad de Dios, llegaré a ustedes con alegría y podré descansar entre ustedes por algún tiempo.
  • A Dios nadie lo ha visto nunca; el Hijo unigénito, que es Dios y que vive en unión íntima con el Padre, nos lo ha dado a conocer.
  • También sabemos que el Hijo de Dios ha venido y nos ha dado entendimiento para que conozcamos al Dios verdadero. Y estamos con el Verdadero, con su Hijo Jesucristo. Este es el Dios verdadero y la vida eterna.
  • En efecto, nosotros somos colaboradores al servicio de Dios; y ustedes son el campo de cultivo de Dios, son el edificio de Dios.
  • No agravien al Espíritu Santo de Dios, con el cual fueron sellados para el día de la redención.
  • Que habite en ustedes la palabra de Cristo con toda su riqueza: instrúyanse y aconséjense unos a otros con toda sabiduría; canten salmos, himnos y canciones espirituales a Dios, con gratitud de corazón.
  • ¿Quién es Dios, si no el Señor?
    ¿Quién es la roca, si no nuestro Dios?
  • Me deleito mucho en el Señor;
    me regocijo en mi Dios.
    Porque él me vistió con ropas de salvación
    y me cubrió con el manto de la justicia.
    Soy semejante a un novio que luce su diadema,
    o una novia adornada con sus joyas.
  • Les digo que así mismo se alegra Dios con sus ángeles por un pecador que se arrepiente.
  • Honra al Señor con tus riquezas
    y con los primeros frutos de tus cosechas.
  • Este mensaje es digno de crédito:
    Si morimos con él,
    también viviremos con él.
  • Tú eres fiel con quien es fiel,
    e irreprochable con quien es irreprochable.
  • Que la gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios y la comunión del Espíritu Santo sean con todos ustedes.
  • Busquen el bien y no el mal, y vivirán;
    y así estará con ustedes el Señor Dios Todopoderoso,
    tal como ustedes lo afirman.
  • ¿Pues quién es Dios, si no el Señor?
    ¿Quién es la roca, si no nuestro Dios?