- No prevalecerá ninguna arma que se forje contra ti;
toda lengua que te acuse será refutada.
Esta es la herencia de los siervos del Señor,
la justicia que de mí procede
—afirma el Señor—. - Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios son hijos de Dios.
- ¿No saben que ustedes son templo de Dios y que el Espíritu de Dios habita en ustedes?
- El Dios que da la paz levantó de entre los muertos al gran Pastor de las ovejas, a nuestro Señor Jesús, por la sangre del pacto eterno. Que él los capacite en todo lo bueno para hacer su voluntad. Y que, por medio de Jesucristo, Dios cumpla en nosotros lo que le agrada. A él sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén.
- Toda tú eres bella, amada mía;
no hay en ti defecto alguno. - Pon la mirada en lo que tienes delante;
fija la vista en lo que está frente a ti. - El segundo es: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”. No hay otro mandamiento más importante que estos.
- Al ver Dios lo que hicieron, es decir, que se habían convertido de su mal camino, cambió de parecer y no llevó a cabo la destrucción que les había anunciado.
- Por eso, cuando des a los necesitados, no lo anuncies al son de trompeta, como lo hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles para que la gente les rinda homenaje. Les aseguro que ellos ya han recibido toda su recompensa.
- El Señor dice:
«Yo te instruiré,
yo te mostraré el camino que debes seguir;
yo te daré consejos y velaré por ti.» - Por eso, dejando a un lado las enseñanzas elementales acerca de Cristo, avancemos hacia la madurez. No volvamos a poner los fundamentos, tales como el arrepentimiento de las obras que conducen a la muerte, la fe en Dios, la instrucción sobre bautismos, la imposición de manos, la resurrección de los muertos y el juicio eterno.
- El que no ama no conoce a Dios, porque Dios es amor.
- En mi corazón atesoro tus dichos
para no pecar contra ti. - Hacia ti extiendo las manos;
me haces falta, como el agua a la tierra seca. Selah - El segundo se parece a este: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”.
- ¡Ah, Señor mi Dios! Tú, con tu gran fuerza y tu brazo poderoso, has hecho los cielos y la tierra. Para ti no hay nada imposible.
- Abba, Padre, todo es posible para ti. No me hagas beber este trago amargo, pero no sea lo que yo quiero, sino lo que quieres tú.
- Pues bien, Dios pasó por alto aquellos tiempos de tal ignorancia, pero ahora manda a todos, en todas partes, que se arrepientan.
- Porque nuestra lucha no es contra seres humanos, sino contra poderes, contra autoridades, contra potestades que dominan este mundo de tinieblas, contra fuerzas espirituales malignas en las regiones celestiales.
- Toda palabra de Dios es digna de crédito;
Dios protege a los que en él buscan refugio. - Predica la Palabra; persiste en hacerlo, sea o no sea oportuno; corrige, reprende y anima con mucha paciencia, sin dejar de enseñar.
- Aunque la higuera no florezca,
ni haya frutos en las vides;
aunque falle la cosecha del olivo,
y los campos no produzcan alimentos;
aunque en el aprisco no haya ovejas,
ni ganado alguno en los establos;
aun así, yo me regocijaré en el Señor,
¡me alegraré en Dios, mi libertador! - ¿Quién es el que vence al mundo sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios?
- Quiero alegrarme y regocijarme en ti,
y cantar salmos a tu nombre, oh Altísimo. - Y nosotros hemos llegado a saber y creer que Dios nos ama. Dios es amor. El que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él.
Versículo de la Biblia del día
En cambio, la sabiduría que desciende del cielo es ante todo pura, y además pacífica, bondadosa, dócil, llena de compasión y de buenos frutos, imparcial y sincera.Versículo de la Biblia al Azar
El que perdona la ofensa cultiva el amor;el que insiste en la ofensa divide a los amigos.Siguiente versículo!Con imagen