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Versículos de la Biblia sobre 'Tiene'

  • El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios, no tiene la vida.
  • El que tiene dos camisas debe compartir con el que no tiene ninguna —les contestó Juan—, y el que tiene comida debe hacer lo mismo.
  • Todo el que niega al Hijo no tiene al Padre; el que reconoce al Hijo tiene también al Padre.
  • Porque, si uno lo hace de buena voluntad, lo que da es bien recibido según lo que tiene, y no según lo que no tiene.
  • Así también la fe por sí sola, si no tiene obras, está muerta.
  • Nadie tiene amor más grande que el dar la vida por sus amigos.
  • Todo tiene su momento oportuno; hay un tiempo para todo lo que se hace bajo el cielo.
  • El hombre debe cumplir su deber conyugal con su esposa, e igualmente la mujer con su esposo. La mujer ya no tiene derecho sobre su propio cuerpo, sino su esposo. Tampoco el hombre tiene derecho sobre su propio cuerpo, sino su esposa.
  • En el último día, el más solemne de la fiesta, Jesús se puso de pie y exclamó: —¡Si alguno tiene sed, que venga a mí y beba!
  • Dichosos y santos los que tienen parte en la primera resurrección. La segunda muerte no tiene poder sobre ellos, sino que serán sacerdotes de Dios y de Cristo, y reinarán con él mil años.
  • Oh Dios, tú eres mi Dios;
    yo te busco intensamente.
    Mi alma tiene sed de ti;
    todo mi ser te anhela,
    cual tierra seca, extenuada y sedienta.
  • El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rechaza al Hijo no sabrá lo que es esa vida, sino que permanecerá bajo el castigo de Dios.
  • El insolente no tiene el alma recta,
    pero el justo vivirá por su fe.
  • Esfuérzate por presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse y que interpreta rectamente la palabra de verdad.
  • Si alguien que posee bienes materiales ve que su hermano está pasando necesidad, y no tiene compasión de él, ¿cómo se puede decir que el amor de Dios habita en él?
  • Supongamos que alguno de ustedes quiere construir una torre. ¿Acaso no se sienta primero a calcular el costo, para ver si tiene suficiente dinero para terminarla?
  • Porque toda casa tiene su constructor, pero el constructor de todo es Dios.
  • De hecho, aunque el cuerpo es uno solo, tiene muchos miembros, y todos los miembros, no obstante ser muchos, forman un solo cuerpo. Así sucede con Cristo.
  • Si caen, el uno levanta al otro.
    ¡Ay del que cae
    y no tiene quien lo levante!
  • ¡Ay del que contiende con su Hacedor!
    ¡Ay del que no es más que un tiesto
    entre los tiestos de la tierra!
    ¿Acaso el barro le reclama al alfarero:
    «¡Fíjate en lo que haces!
    ¡Tu vasija no tiene agarraderas!»?
  • Depositen en él toda ansiedad, porque él cuida de ustedes.
  • Él fortalece al cansado
    y acrecienta las fuerzas del débil.
  • De modo que se toleren unos a otros y se perdonen si alguno tiene queja contra otro. Así como el Señor los perdonó, perdonen también ustedes.
  • Todo esfuerzo tiene su recompensa,
    pero quedarse solo en palabras lleva a la pobreza.
  • El padre del justo experimenta gran regocijo;
    quien tiene un hijo sabio se solaza en él.
  • No amen al mundo ni nada de lo que hay en él. Si alguien ama al mundo, no tiene el amor del Padre.
  • Tengo sed de Dios, del Dios de la vida.
    ¿Cuándo podré presentarme ante Dios?
  • Por lo tanto, no se angustien por el mañana, el cual tendrá sus propios afanes. Cada día tiene ya sus problemas.
  • ¿Por qué te fijas en la astilla que tiene tu hermano en el ojo, y no le das importancia a la viga que está en el tuyo?
  • Quien ama el dinero, de dinero no se sacia. Quien ama las riquezas nunca tiene suficiente. ¡También esto es absurdo!
  • Así que mi Dios les proveerá de todo lo que necesiten, conforme a las gloriosas riquezas que tiene en Cristo Jesús.
  • Es cierto que con la verdadera religión se obtienen grandes ganancias, pero solo si uno está satisfecho con lo que tiene.
  • Todo lo que se mueve y tiene vida, al igual que las verduras, les servirá de alimento. Yo les doy todo esto. Pero no deberán comer carne con sangre; la sangre es vida.
  • Los malvados piden prestado y no pagan,
    pero los justos dan con generosidad.
  • De todos los animales que viven en el agua podrás comer los que tienen aletas y escamas, pero no podrás comer los que no tienen aletas ni escamas, sino que los tendrás por animales impuros.
  • Bien le va al que presta con generosidad,
    y maneja sus negocios con justicia.
  • Queridos hermanos, ahora somos hijos de Dios, pero todavía no se ha manifestado lo que habremos de ser. Sabemos, sin embargo, que cuando Cristo venga seremos semejantes a él, porque lo veremos tal como él es. Todo el que tiene esta esperanza en Cristo se purifica a sí mismo, así como él es puro.
  • No se preocupen por su vida, qué comerán; ni por su cuerpo, con qué se vestirán. La vida tiene más valor que la comida, y el cuerpo más que la ropa.
  • Muy bien —le contestó el Señor—. Todas sus posesiones están en tus manos, con la condición de que a él no le pongas la mano encima. Dicho esto, Satanás se retiró de la presencia del Señor.
  • En realidad, sin fe es imposible agradar a Dios, ya que cualquiera que se acerca a Dios tiene que creer que él existe y que recompensa a quienes lo buscan.
  • ¿Quién es el que me ama? El que hace suyos mis mandamientos y los obedece. Y al que me ama, mi Padre lo amará, y yo también lo amaré y me manifestaré a él.
  • Hay amigos que llevan a la ruina,
    y hay amigos más fieles que un hermano.
  • Porque el Señor se complace en su pueblo;
    a los humildes concede el honor de la victoria.
  • Hay quien considera que un día tiene más importancia que otro, pero hay quien considera iguales todos los días. Cada uno debe estar firme en sus propias opiniones.
  • Pues aunque el ejercicio físico trae algún provecho, la piedad es útil para todo, ya que incluye una promesa no solo para la vida presente, sino también para la venidera.
  • Por eso les digo: No se preocupen por su vida, qué comerán o beberán; ni por su cuerpo, cómo se vestirán. ¿No tiene la vida más valor que la comida, y el cuerpo más que la ropa?
  • Y nosotros hemos llegado a saber y creer que Dios nos ama. Dios es amor. El que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él.
  • ¿Quién eres tú para juzgar al siervo de otro? Que se mantenga en pie, o que caiga, es asunto de su propio señor. Y se mantendrá en pie, porque el Señor tiene poder para sostenerlo.
  • El Señor no tarda en cumplir su promesa, según entienden algunos la tardanza. Más bien, él tiene paciencia con ustedes, porque no quiere que nadie perezca, sino que todos se arrepientan.
  • Por esto, despójense de toda inmundicia y de la maldad que tanto abunda, para que puedan recibir con humildad la palabra sembrada en ustedes, la cual tiene poder para salvarles la vida.